PRACTICAMOS DIARIO
Por Gudrun.
Ya sea que desees ser un artista consagrado o un dibujante en tus tiempos libres, es preferible serlo de la mejor manera. Esto evitará grandes frustraciones y posible abandono de la actividad que tanto te gusta.
¿Por qué hay personas que dibujan tan bien y parece que no les cuesta trabajo? ¿Cuál es su secreto? ¿Cómo deben estar alineados los planetas para que al nacer tengamos ese talento?
No se trata de un pacto con el diablo ni es cuestión de astrología. El secreto está en la práctica.
Como todo conocimiento, de no tenerlo presente o no practicarlo, se va perdiendo. Porque incluso el andar en bicicleta se puede olvidar si dejas de hacerlo por años. Tal vez no cueste tanto como la primera vez, pero habrá complicaciones para entenderle de nuevo.
La práctica no es más que cuestión de un hábito y de darle importancia a lo que estamos aprendiendo, hasta que llegue el punto en el que, si no lo haces, se sienta tan raro como cuando no te lavas las manos antes de comer.
Iniciemos con la creación de este hábito. Primero debemos saber cuál es nuestra meta. Ésta debe ser alcanzable. No vamos a ponernos como meta trabajar en Disney el próximo año cuando aún no sabemos ni cómo se sostiene un lápiz. Este tipo de metas lo único que logran es frustración y abandono.
Podemos empezar con la meta de aprender los fundamentos del dibujo. Puedes consultar nuestro artículo ¿Realmente necesito aprender las bases si quiero dibujar bien? y así darte una idea de las bases necesarias.
Por supuesto que al iniciar los trazos no saldrán como lo planeamos y nos tomará un rato entender algunos conceptos y desarrollarlos. Por esto es importante la tolerancia a la frustración. Hacer conciencia que únicamente la práctica nos llevará al dominio. Es importante no saturarte. Una cosa es practicar diario y otra hacerlo durante horas, intentando compensar tiempos. Así solo se llega al aturdimiento.
Junto con las bases del dibujo, aprenderás que es muy importante copiar obras ya hechas. No hablamos de copiar y adjudicarse lo que no es nuestro. Por ética, siempre que copies una obra y lo hagas público, ya sea subiéndolo a tus redes sociales o simplemente enseñándolo a alguien más, da crédito al autor.
Hablamos de explorar cómo otros artistas ya han resuelto obras de nuestro agrado. Será como experimentar en cabeza ajena.
Para toda creación de hábito es importante ponerle un tiempo y dedicarlo exclusivamente a eso. Organiza un horario para que ese momento no sea solamente si te sobra tiempo. Dedica una hora a la práctica de trazos, al repaso de las proporciones, a observar tu entorno, pero siempre, siempre, ten preparado lo que harás durante esa hora. Tanto el material como el tema. Porque la hoja en blanco puede ser un impedimento si no has planeado lo que harás y esa hora se convertirá en momento de contemplación.
También te recomendamos tener un guía. Esa persona que ya tiene experiencia en el tema y puede ser un atajo para que logres tu meta.
Por último, cuando ya tienes las bases comprendidas y practicadas, no es recomendable parar. Porque son esos descansos largos los que hacen que perdamos el dominio.
Recuerda que no es para complacer a nadie más que a ti en tu desarrollo como artista, y que esos maestros y listas sugeridas están para apoyarte.
Referencias:
Manifiesto Artinside. Consultado el 25/01/2019 https://www.artinside.com.mx/manifiesto